Ni tiaras ni diamantes, estas son las joyas con más significado de Mary de Dinamarca

Además de esas joyas que pasan de generación en generación y que tienen años y años de historia, el joyero de Mary de Dinamarca está repleto de piezas especiales. Y es que, entre piezas tan especiales como esta tiara de estilo medieval se encuentran pulseras, collares o pendientes con mucho significado y que incluso pueden tener un precio mucho más asequible.

Mary Donaldson es conocida por un impecable armario con prendas y accesorios de todo tipo y de mucho valor que le han llevado a ser una de las royals mejor vestidas del mundo. Y si la polémica colección de bolsos te sorprendió, atenta a los joyas con mensaje oculto que siempre lleva.

Los pendientes Gipsy de la firma danesa Ole Lynggaard Copenhagen los estrenó en París hace tan solo unas semanas y parece que se los ha copiado a Máxima de Holanda. La reina holandesa los tiene desde hace 8 años, están entre sus favoritos y ya se los ha prestado a su hija mayor, la princesa Amalia. ¿Lo más sorprendente? Que alcanzan la cifra de 16.000 euros.

Este collar que Mary ha llevado durante bastante tiempo fue toda una declaración de intenciones incluso cuando los rumores sobre una posible infidelidad por parte de Federico protagonizaban la actualida de la casa real danesa. Se trata de un collar de la letra «F», la inicial de su marido, de la firma Halberstadt y está hecha en oro blanco y diamantes.

Lejos de ser una joya antigua que había pasado de generación en generación, Mary de Dinamarca estrenó en el día de su boda unos pendientes que eran un guiño a su tierra, Australia. Tenían como protagonistas dos grandes perlas de los mares del Sur -están entre las más caras y raras del mercado, pues tardan cinco años en producirse- enmarcadas por diamantes engastados en platino. Unas piezas que ha lucido en otras ocasiones y que le vimos por última vez el año pasado.

Mary tiene en su joyero este brazalete icónico del mundo de la moda que fue creado en 1969 por un diseñador de joyas italiano llamado Aldo Cipullo y que tiene un poderoso mensaje: el amor. Es una pieza de oro que tiene un coste de 12.100 euros y que, a través de sus tornillos como del sistema de cierre relaciona el amor verdadero.

En su viaje a París de este año estrenó unos llamativos pendientes largos con diseño de filigrana portuguesa de la firma lusa Alma E. Coraçao. Una elección llamativa no solo por su precio asequible, 75 euros, sino también por su nombre, Reina, con el que quizá asentar su condición de consorte.

Son unos pendientes de diamantes engastados en oro que Mary de Dinamarca adquirió en la casa de subastas Bruun Rasmussen en diciembre de 2016 por 5.350 euros. La reina los ha llevado en las celebraciones importantes como por ejemplo la que tuvo lugar con motivo del 18 cumpleaños del príncipe Christian en el Palacio de Christiansborg en 2023.